PALMA SOLA EN VERSOS
PALMA SOLA EN VERSOS
En diciembre veintiocho
del año sesenta y dos
un genocidio ocurrió
en el kilómetro ocho
Las Matas-Carreyegua.
Los hechos de Palma Sola
fueron más que una tragedia
unos dicen, ¿Que comedia?
y otros, ¿pero que bola?
De San Juan llegó al Consejo
un informe policial
cuenta deba en especial
que en las Matas había un lío
producto de un gran vahío.
El mayor Francisco Alberto
una orden recibió
para investigar el lío
que en Palma Sola surgió.
Tomás le ordenó a Badín
¡Vaya usted a Palma Sola!,
investigue entre las olas,
si hay tormenta, y su fin.
Con Vásquez el procurador
Caamaño se presentó
y en palma Sola contó
del apoyo Tomás,
Baldemar y otros más.
Cuando Caamaño llegó
a investigar la denuncia
el general Reyes, anuncia
el peligro que encontró.
Vinieron en helicóptero
con ordenes de matar
entre
muerto cayó Helliodoro.
De
con grandes altos parlantes
y al llamar a los andantes
estos jamás los oyeron.
León subió al helicóptero
un mensaje envió a sus gentes
su llamado no prudente
no llegó a los inocentes.
Mellizo dijo a Belisario
¡General Guerrero! Tenga paciencia
más vale tener prudencia
que morir en el calvario.
Siguió diciendo el Mellizo
al general Belisario,
escoja usted su rosario
que yo tengo mi cobrizo.
Monseñor Tomás Reilly
hombre fuerte de San Juan
se portó como un don Juan
y al saber de la cuestión
le buscó la solución.
Oliverio era un Dios
decían los maguaneros
desapareció en el higüero
y a los tres meses volvió.
Nosotros los livoristas
nos queremos mucho más,
y aunque se fue el maná,
quedamos los evangelistas.